La UE dijo ayer que hay una "tendencia negativa" en Turquía en cuanto al respeto de libertades y derechos fundamentales e instó al Gobierno de Ankara a hacer reformas para garantizar la libertad de expresión dentro del proceso de adhesión.

"Hay que reconocer la cooperación de Turquía en el plan de acción para la migración, pero nuestra relación va más allá y debe hacer reformas indispensables para avanzar hacia la adhesión", afirmó el comisario europeo de Ampliación, Johannes Hahn, quien presentó ayer un informe que ha dormido en un cajón durante semanas para no perjudicar al partido del presidente Erdogan en las elecciones del pasado día 1 de noviembre.

Con todo, el Ejecutivo turco no se ha tomado nada bien las críticas, en especial las relativas a la concentración de poderes en manos presidenciales. "Los comentarios respecto al uso de poderes otorgados por la Constitución al primer presidente elegido de forma directa son inaceptables", señala el comunicado hecho público en la web del ministerio turco de Exteriores.