El Partido Laborista británico decidió ayer que sus diputados contarán con libertad de voto en el Parlamento respecto a la propuesta del Gobierno para que el Reino Unido se sume a los bombardeos internacionales contra el Estado Islámico (EI) en Siria.
La decisión puede facilitar que el plan del primer ministro, el conservador David Cameron, obtenga una mayoría amplia en la Cámara de los Comunes, dado que numerosos parlamentarios laboristas se han posicionado a favor de la intención del Ejecutivo y en contra de la opinión de su líder, Jeremy Corbyn.
El equipo de Corbyn, el llamado "gabinete en la sombra", acordó ayer, tras dos horas de reunión, relajar la disciplina parlamentaria en este caso, una medida que el "número dos" de la formación, Tom Watson, y otros dirigentes habían reclamado.
Antes de que los diputados laboristas puedan pronunciarse sobre los bombardeos, el partido ha pedido a Cameron que su propuesta se debata durante dos días en el Parlamento.
Según una fuente del partido de Corbyn citada por la agencia local PA, un 57% de los laboristas prevé votar en contra de los bombardeos y un 43% está a favor del plan de Cameron, que anunció que esperaría a contar con una "amplia mayoría" para convocar una votación en el Parlamento. Según algunos medios, podría ser esta misma semana.
