La jueza federal argentina María Servini de Cubría dictaminó ayer que la Presidencia de Cristina Fernández debe terminar un minuto antes de la medianoche del miércoles (03.59 de hoy en la España peninsular) y que un minuto después comienza el mandato del presidente electo, Mauricio Macri. La jueza avala la medida cautelar solicitada por Macri, líder de la alianza conservadora Cambiemos, para ser considerado presidente antes de jurar su cargo.

Aún así, aclara que tanto Macri como la vicepresidenta electa, Gabriela Michetti, solo tomarán posesión de sus cargos una vez que presten juramento ante el Parlamento.

En las doce horas previstas entre el inicio del mandato de Macri y su toma de posesión, quien estará a cargo de la Jefatura de Estado argentina será el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo.

La medida cautelar fue solicitada por Macri para zanjar el conflicto abierto entre el Gobierno saliente y el entrante por el lugar de entrega de los atributos de mando, la banda y el bastón presidenciales.

La insólita polémica se agudizó por la decisión de Fernández de organizar el traspaso de poderes en el Congreso, cuando su sucesor pretendía asumir los atributos de mando en la sede del Gobierno.

El desencuentro derivó en la medida cautelar solicitada por Macri para que se adelantara a la medianoche su consideración como presidente. El fiscal Jorge di Lello emitió un dictamen favorable a la solicitud que precipitó la decisión de Fernández de no acudir a la ceremonia.