Un tribunal de Gotemburgo (oeste de Suecia) condenó ayer a cadena perpetua a dos ciudadanos suecos, dos hombres de 30 y 32 años, por un delito de colaboración en acto terrorista al considerar probado que participaron en la ejecución de dos personas en Siria en 2013. La condena se basa en una memoria USB encontrada en casa de uno de los individuos que contiene tres vídeos donde dos personas, presumiblemente civiles, son decapitadas a cuchillo por supuestos yihadistas que celebran la ejecución, entre ellos los dos suecos. Se trata del primer veredicto por delitos terroristas en Siria contra ciudadanos suecos.