La Policía alemana ha descartado que hubiese explosivos en el paquete "sospechoso" hallado este miércoles en la oficina de la canciller de Alemania, Angela Merkel, que permaneció varias horas acordonada como medida de seguridad.

"Los expertos no han encontrado nada sospechoso", ha informado un portavoz de la Policía Federal. Junto al edificio, las fuerzas de seguridad han investigado varias cajas de plástico para el correo en las que tampoco se habría hallado nada.

La alerta en la Cancillería --situada en el centro de Berlín-- coincide con una reunión del Gobierno. En 2010, la Policía ya interceptó un paquete con explosivos enviado desde Grecia a la oficina de Merkel y, en la última Nochevieja, las autoridades desarticularon un supuesto complot terrorista contra estaciones de la ciudad de Múnich.