Hasta 28 personas murieron el viernes por la noche y el sábado por la mañana en el ataque coordinado contra un hotel de lujo de Uagadugú, la capital de Burkina Faso, y otros dos emplazamientos más de las inmediaciones, todos ellos frecuentados por financieros, comerciantes y militares occidentales. La acción fue reivindicada por los yihadistas de Al Qaeda en el Magreb Islámico. Entre otros, el ataque ha costado la vida a seis canadienses, cuatro ucranianos (entre ellos un niño de nueve años), dos franceses, dos suizos, un estadounidense, un portugués y un holandés. Hay víctimas mortales de no menos de 18 países.