El ministro de Exteriores alemán, el socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier, avanzó ayer el temor de su Gobierno a que "más de 300 refugiados" hayan perecido en un naufragio frente a las costas de Egipto. La información no estaba confirmada anoche y medios oficiales egipcios no se habían hecho eco de ella.

El homólogo italiano de Steinmeier, Paolo Gentiloni, calificó de "tragedia" el nuevo naufragio en el Mediterráneo y explicó que su Ejecutivo estaba a la espera de "más detalles" de lo sucedido.

La noticia de este naufragio se produjo precisamente cuando ayer se conmemoraba el primer aniversario de la tragedia de Lampedusa (Italia) en la que 800 personas que querían llegar a este último país perdieron la vida en el Mediterráneo. A raíz del aniversario, Oxfam Intermón instó a la UE y a España a asumir su responsabilidad.

Precisamente, la vía italiana de acceso a la UE está resurgiendo como consecuencia del cierre de la frontera griega y los acuerdos de repatriación con Turquía. Datos hechos públicos ayer por Frontex, la agencia de control fronterizo de la UE, indican que 26.460 inmigrantes llegaron en marzo a Grecia, menos de la mitad que en febrero, mientras las llegadas a Italia se duplicaron hasta alcanzar las 9.600.

Amnistía Internacional publicó ayer un informe en el que alerta de la situación extrema que viven los más de 46.000 refugiados atrapados en Grecia tras el cierre total de la frontera con Macedonia el pasado 7 de marzo. Los refugiados están viviendo "en condiciones terribles y en un estado de miedo e incertidumbre constantes", afirmó Amnistía en su informe.