La ministra principal de Escocia, la nacionalista Nicola Sturgeon, anunció ayer que la opción de convocar un segundo referéndum de independencia "está muy presente y sobre la mesa" tras el resultado del referéndum del jueves en el Reino Unido, en el que el 62 por ciento de los escoceses se pronunció por la permanencia en la UE.

Sturgeon señaló que el Gobierno del Partido Nacionalista Escocés (SNP, por sus siglas en inglés) impulsará la legislación necesaria para convocar una segunda consulta soberanista en la región. Así lo trasladó a los medios la ministra principal al término de un Consejo de Ministros de urgencia celebrado en Bute House, en Edimburgo, para analizar las consecuencia del "Brexit".

Además, Sturgeon anunció la apertura de contactos "inmediatos" del Gobierno de Escocia con las instituciones comunitarias "para mantener el lugar de Escocia en la UE".

Por otra parte, la jefa de Gobierno informó de la creación de una comisión asesora de expertos de toda Escocia para aconsejar al Gobierno de Edimburgo sobre las opciones que tiene en los ámbitos legal, económico y diplomático. El objetivo es estudiar lo que el Gobierno escocés puede hacer "aquí y ahora" tras la decisión tomada por los británicos.

Sturgeon se refirió asimismo a los ciudadanos de la UE que viven en el Reino Unido. "Los ciudadanos de la UE son bienvenidos aquí", aseguró. En ese sentido, dijo que invitará a los cónsules generales de todos los países de la UE a una reunión en Bute House para transmitirles lo mucho que Escocia valora su contribución a la sociedad, economía y cultura escocesas.

En la consulta soberanista del 18 de septiembre de 2014, el 55% de los escoceses votaron en contra de la independencia, que fue la opción elegida por el 45% restante, pero desde entonces el SNP de Sturgeon logró una rotunda victoria en las elecciones al Parlamento de Londres y mantiene un Gobierno estable y una cómoda posición en el Parlamento de Edimburgo, a sólo dos escaños de la mayoría absoluta.