Al menos 35 rebeldes y 17 soldados de las tropas gubernamentales murieron ayer en loscombates por el control de la ciudad siria de Alepo. Rusia, cuya aviación apoya al ejército de Bachar Al Asad, estableció una tregua humanitaria de tres horas diarias algo que la ONU considera insuficiente. En la imagen, habitantes de Alepo inspeccionana las ruinas de sus casas tras los bombardeos. Por otra parte, al menos 32 rebeldes murieron en un atentado suicida del Estado Islámico en la frontera entre Siria y Turquía.