El monte Aso, volcán situado en el suroeste de Japón y uno de los más activos del país, registró hoy su primera erupción explosiva en 36 años sin que el fenómeno causara daños de gravedad o afectara al transporte, informó la Agencia Meteorológica de Japón (JMA).

El volcán, de 1.562 metros de altitud comenzó a erupcionar de madrugada y escupió ceniza a una altura de hasta 11.000 metros, según ha detallado la JMA.

No se ha informado de daños graves o heridos en las inmediaciones del Monte Aso, situado en el corazón de la prefectura de Kumamoto, aunque algunas calles de municipios cercanos han amanecido cubiertas por finas capas de ceniza.

La JMA ha elevado el nivel de alerta del 2 al 3 (en una escala de 5), por lo que aconseja no acercarse al Monte Aso y advierte del peligro de desprendimientos.

También se ha instado a los residentes de las zonas colindantes a estar alerta ante la posibilidad de una nueva erupción que esparza ceniza y gases volcánicos.

Las prefecturas de Kumamoto y Oita sufrieron el pasado abril los peores terremotos que han golpeado Japón desde el desastre de marzo de 2011.

Sin embargo, los especialistas desconocen si estos movimientos telúricos, que dejaron 49 fallecidos y a miles de personas sin hogar, han afectado de alguna manera al Monte Aso, que se encuentra cerca de los epicentros de estos temblores y que erupcionó por última vez el pasado mayo.

La última vez que este volcán registró una erupción explosiva fue en enero de 1980.

Apenas unos meses antes, en septiembre de 1979, otra erupción desencadenó una serie de desprendimientos que mataron a tres excursionistas que se hallaban en la zona.

Japón está situado dentro del llamado anillo de fuego de la cuenca del Pacífico y cuenta en su territorio con unos 110 volcanes activos.