La excandidata presidencial demócrata, Hillary Clinton, culpó ayer de su inesperada derrota al FBI por haber anunciado unos días antes de las elecciones una nueva investigación relacionada con el uso de servidores de correo privados que hizo cuando era secretaria de Estado. Estas son las declaraciones más extensas que Clinton hace desde el discurso de Nueva York, el pasado miércoles, en el que admitió su derrota. En una llamada telefónica con donantes, filtrada a medios como "The Washington Post", Clinton responsabilizó de la derrota al director del FBI, James Comey, que once días antes de las elecciones anunció una nueva investigación en su contra. Clinton cree que la decisión de Comey colocó de nuevo la polémica de los correos electrónicos en la portada de los medios y le impidió cerrar la campaña con un mensaje optimista para conquistar a los indecisos, convirtiéndose en "una verdadera motivación para los votantes de Trump", que piensan que el sistema está "amañado".