Estados Unidos inició ayer, con el desembarco en el puerto alemán de Bremerhaven de un primer envío de equipamiento, su despliegue en el marco de una operación de la OTAN para fortalecer la capacidad defensiva de los países aliados en el centro y este de Europa ante posibles amenazas por parte de Rusia.

Los primeros tanques, camiones y vehículos todoterreno llegaron a Alemania el miércoles y está previsto que hasta mañana se descarguen otros dos buques, cuya carga tiene como destino Polonia. Desde hoy y hasta el 16 de enero partirán cada día tres trenes con equipamiento militar, según un portavoz del mando del ejército alemán en el estado federado de Brandeburgo.

Novecientos vagones de tren transportarán más de 2.500 vehículos militares y la mayoría de los más de 4.500 efectivos estadounidenses que serán desplegados en el marco de la operación llegarán a Polonia en avión.

El objetivo de la operación "Atlantic Resolve" de la OTAN es ofrecer garantías de paz en Europa y realizar una demostración de fuerza frente a Rusia.

Los pacifistas alemanes convocaron para hoy en el centro de Bremerhaven una manifestación, a la que se espera acudan unas 500 personas, para protestar contra la presencia militar estadounidense en el este de Europa, algo que tachan de "provocación".

En paralelo a esta operación en el centro de Europa. Rusia inició ayer el repliegue de su fuerzas en Siria con la retirada de su único portaaviones, el "Almirante Kuznetsov", maniobra que se produce una semana después de la entrada en vigor del alto el fuego entre Damasco y la oposición.

Putin ordenó el repliegue de una parte de las tropas rusas estacionadas en la zona al anunciar el pasado 29 de diciembre el acuerdo de alto el fuego entre el régimen de Bachar al Asad y la oposición armada siria. Pese a ello, insistió en que el Kremlin "seguirá apoyando al legítimo gobierno sirio (de Bachar al Asad) en su lucha contra los terroristas" y mantendrá su presencia en el aeródromo de Latakia y la base naval de Tartus, cuya seguridad está garantizada con los baterías de misiles antiaéreos S-300 y S-400.La liberación de la segunda ciudad siria, Alepo, por las fuerzas gubernamentales con ayuda de la aviación rusa y las milicias iraníes propició la decisión del Kremlin de reducir su contingente militar. La llegada a la zona en octubre del vetusto "Almirante Kuznetsov" causó un gran revuelo debido a la renuencia de los países de la OTAN, entre ellos España, a dejarle repostar en sus puertos.