El Gobierno italiano sospecha que Rusia está detrás de un ataque informático registrado en 2016, en el que "hackers" interceptaron correos electrónicos de su ministerio de Exteriores, según comunicaron ayer fuentes del Ejecutivo italiano a la edición digital del diario británico "The Guardian". Fuentes del Ejecutivo italiano informaron al rotativo de que el ataque se alargó más de cuatro meses, aunque no afectó a información sensible.