Una auténtica tormenta mediática se abatió estos días en EE UU sobre Milo Yiannopoulos, uno de los editores estrella de la web ultraderechista Breitbart, capitaneada hasta su desembarco en la Casa Blanca por el actual jefe de estrategia de Trump, el agitador Steve Bannon. Yiannopoulos, de 33 años, anunció anoche su dimisión.
La controversia comenzó con la publicación de unos vídeos en los que el provocador bromeaba sobre un encuentro sexual que tuvo de adolescente con un sacerdote católico. Yiannopoulos añadía comentarios interpretados como una defensa de las relaciones sexuales entre adultos y menores. Como consecuencia, la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), que se celebrará entre hoy y el viernes, retiró a Yiannopoulos la invitación que le había cursado. "Pensamos que la CPAC es un foro constructivo para el debate y la confrontación de ideas entre conservadores. Sin embargo, no hay desacuerdos entre nuestros asistentes sobre los males del abuso sexual a niños", dijeron los organizadores del encuentro. En paralelo, los compañeros de Yiannopoulos en Breitbart amenazaron con dimitir si él no lo hacía.
