Un pastor cristiano ha encontrado uno de los diamantes en bruto más grandes del mundo, con un peso de 706 quilates, en la región de Kono, en Sierra Leona.

El diamante ha sido guardado en el Banco Central del país y el Gobierno tiene pensado subastarlo, según han informado fuentes de la Administración.

Un jefe local de Kono ha entregado la piedra al presidente, Ernest Bai Koroma, en nombre de Emmanuel Momoh, que hizo el descubrimiento.

La Presidencia ha informado este jueves en un comunicado de que Koroma agradecía al jefe local de Kono, que ha actuado como intermediario, por no traficar con el diamante fuera del país.

"Koromo ha subrayado la importancia de vender ese tipo de diamantes aquí, ya que claramente dará a sus dueños lo que les debe y beneficiará al país en su conjunto", ha asegurado el comunicado.

El diamante aún no ha sido valorado, pero podría valer millones de dólares. Según datos del Banco Mundial, el PIB per cápita en Sierra Leona se situó en 620 dólares en 2015.

Los diamantes fueron el motivo de una guerra civil de diez años en Sierra Leona, que acabó en 2002, y en la que murieron al menos 50.000 personas. Los rebeldes obligaban a los civiles en el este a extraer los diamantes y compraban armas con las ganancias, lo que llevó al término "diamantes de sangre".

Naciones Unidas levantó la prohibición sobre las exportaciones de diamantes de Sierra Leona en 2003. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), el país espera exportar este año un total de 113.000 millones de dólares en diamantes.