La Fiscalía Federal belga acusó ayer al conductor detenido el jueves en Amberes -por conducir a gran velocidad por una calle peatonal con su vehículo y provocar el pánico entre los viandantes- de "tentativa de asesinato con carácter terrorista" y de infringir la legislación de armas vigente. El detenido, Mohamed R., de 39 años, es un tunecino con residencia en Francia que conducía un vehículo con matrícula gala en cuyo maletero llevaba armas blancas, una escopeta antidisturbios y un bidón con un "contenido indeterminado".

Sin embargo, la propia Fiscalía belga concedió ayer mismo que por el momento no se puede confirmar "la pista terrorista", lo que ha añadido confusión a una situación ya oscura. De hecho, fuentes de la investigación confirmaron a la prensa local que el detenido aparenta ser un drogadicto que sólo dice incoherencias y que niega haber estado en el lugar de los hechos.