"Lo que deseamos ahora toda la familia es que los trámites se acaben cuanto antes, que repatríen el cadáver y que podamos enterrarlo en paz", ha declarado a este periódico Enrique Echeverría, uno de los primos asturianos de Ignacio Echeverría, el joven asesinado en Londres el pasado sábado y que pasará a la historia como "el héroe del monopatín". "Supongo que todavía tardarán unos días", agregó Enrique Echeverría, quien se mantiene en comunicación con el resto de la familia mediante un grupo de "whatsapp".

El joven de 39 años fallecido, hijo de un ovetense, trató de defender a las víctimas de los terroristas y para ello se enfrentó con su monopatín a tres de ellos a la vez. Finalmente, cayó muerto a causa de una puñalada, según han testimoniado los amigos que le acompañaban después de unas horas de deporte y descanso.

"La esperanza es lo último que se pierde, pero era claro que la posibilidad de que estuviera muerto estaba ahí", señaló Enrique Echeverría, en relación a la tardanza de las autoridades británicas en confirmar que Ignacio era uno de los ocho fallecidos en el ataque yihadista localizado en el puente de Londres y en el cercano mercado de Borough.

Enrique Echeverría rememoró los largos veranos en la casa de sus abuelos vividos con sus primos, entre ellos Ignacio, al que aventajaba en siete años. "Como es normal cuando se vive en lugares distintos, con el paso de los años el contacto fue haciéndose menos frecuente. Pero procurábamos juntarnos en Semana Santa, en Navidad o algún fin de semana en verano", indicó Enrique Echeverría, quien sospecha que, pese a la entereza mostrada por los hermanos de Ignacio que están dando la cara ante los medios de comunicación en Londres, "está claro que la procesión va por dentro". "Si los que estamos aquí sufrimos, ellos mucho más", apostilló.