El exministro Richard Ferrand fue nombrado ayer, tal como se había anunciado, presidente del Grupo parlamentario de la República en Marcha (REM), el partido del presidente, Emmanuel Macron, pese a las sospechas que pesan sobre él por nepotismo.

Los diputados de REM, reunidos en un seminario en París con vistas al inicio de la legislatura tras las elecciones legislativas del 11 y 18 de junio, designaron a Ferrand, que logró mantener el escaño por el que competía, en una circunscripción de Bretaña.

En una nota de la formación de Macron, el nuevo jefe del grupo en la Asamblea Nacional, un antiguo político socialista, agradeció la "confianza" de sus compañeros. Afirmó que desde su nuevo cargo, su propósito es cumplir con "la promesa de renovación de las prácticas políticas".

"Tenemos una ardiente obligación de éxito. Los franceses no quieren más intenciones, quieren resultados", concluyó Ferrand.