La ONG "Sea Eye", que salva a inmigrantes en el Mediterráneo central, acudió hoy a auxiliar a la nave "C-Star", fletada para frenar la inmigración por el movimiento xenófobo "Generación Identitaria", que rechazó la ayuda en el mar. "Sea eye", con sede en Alemania, informó en su perfil de Facebook que fue contactada por el centro de coordinación de rescate de Roma (MRCC, en inglés) para proporcionar ayuda a la "nave nazi", que se encuentra frente a las costas de Libia.

Horas después, la ONG explicó en la red social Twitter que se ha dirigido a la zona y que ha contactado por radio con la tripulación de la embarcación "C-Star", que se ha negado a recibir asistencia. "Contactados por radio, (...) han rechazado cualquier ayuda", relató la ONG, que ha puesto rumbo a la zona SAR (de búsqueda y rescate) en el Mediterráneo a indicaciones de la central de coordinación de rescates de Roma.

El movimiento "Generación Identitaria" informó en un comunicado de que su embarcación había "tenido un ligero problema técnico durante la noche" y que trataba de resolverlo. El presidente de la ONG "Sea Eye", Michael Buschheuer, declaró que "ayudar ante el peligro es el deber de cualquier persona que esté en el mar, sin distinción de su origen, color, religión o convicciones".

El movimiento xenófobo se echó al mar para impulsar la misión "Defend Europe", dirigida a patrullar el Mediterráneo, "vigilar" las actividades de las ONG, a las que acusa de fomentar la inmigración, y devolver a la costa africana a los emigrantes que encuentren. Esta misión la han ido documentando en diferentes idiomas en sus redes sociales, con vídeos en los que se puede ver a sus jóvenes integrantes dirigirse con megáfonos a las ONG que salvan a inmigrantes para exigirles su retirada, entre otras cosas.

Desde que zarpara, el "C-Star" fue retenido en Chipre, no logró atracar en el puerto siciliano de Catania, como tenía previsto, y se ha topado con las protestas de decenas de personas cuando ha intentado alcanzar puertos tunecinos para proveerse. De hecho, el pasado día 6 la tripulación del "C-Star" decidió no acceder al puerto tunecino de Zarzis, donde sindicalistas, militantes, pescadores y trabajadores portuarios se manifestaban contra la iniciativa, que tildaban de "racista".