Bombarderos y cazas estadounidenses volaron este sábado cerca de las costas de Corea del Norte para enviar un "mensaje claro" de que EEUU dispone de "opciones militares" ante cualquier amenaza, informó el Pentágono.

"Esta misión es una demostración de la determinación de EEUU y un mensaje claro de que el presidente (Donald Trump) tiene muchas opciones militares para derrotar cualquier amenaza", afirmó la Portavoz del Pentágono, Dana W. White, en un comunicado.

La portavoz precisó que bombarderos B-1B procedentes del territorio estadounidense de la isla de Guam y cazas F-15C Eagle desplegados desde Okinawa (Japón) "volaron en el espacio aéreo internacional sobre aguas al este de Corea del Norte".

"Esto es lo más lejos al norte de la zona desmilitarizada (DMZ, que separa a las dos Coreas) que han volado un caza o un bombardero de EE.UU. sobre la costa de Corea del Norte en el siglo XXI", indicó el Pentágono.

Esa operación, agregó White, remarca la "gravedad" del "comportamiento temerario" del régimen de Pyongyang.

El Pentágono informó de los vuelos antes de que el ministro norcoreano de Exteriores, Ri Yong ho, en la Asamblea General de la ONU, y después de imponer esta semana nuevas sanciones contra ese país.

Las nuevas sanciones económicas incluyen la prohibición de visitar EEUU por 180 días a barcos y aviones que hayan estado previamente en Corea del Norte.

Este veto también se aplicará a barcos que hayan comerciado con otros buques que hayan visitado Corea del Norte en los 180 días previos.

El presidente Trump ordenó las sanciones a través de un decreto cuyo objetivo "es aumentar al máximo la presión sobre Corea del Norte para demostrar a sus líderes que el mejor y único camino es el regreso a la desnuclearización".

En su discurso en la Asamblea General de Naciones Unidas el pasado martes, el mandatario estadounidense advirtió de que si EE.UU. es forzado a defenderse a sí mismo o a sus aliados "no nos quedará más opción que destruir totalmente Corea del Norte

Las continuas pruebas de armas de Pyongyang, que le han deparado ya dos nuevos paquetes de sanciones de la ONU solo en 2017, y el tono beligerante de Trump han elevado enormemente la tensión en la península coreana en el último año.

"Nuestro sistema nuclear está en su fase final"

Por su parte, Corea del Norte afirmó este sábado en la ONU que está entrando en la "fase final" del establecimiento de un sistema nuclear, que asegura tiene fines defensivos y sólo utilizará como última opción.

"Estamos a unos pasos de completar nuestra capacidad nuclear", afirmó ante la Asamblea General de la ONU el ministro de Exteriores de Corea del Norte, Ri Yong Ho.

Ri informó que su país recientemente "ha realizado con éxito" una prueba de una bomba de hidrógeno que podría ser montada en un misil intercontinental, "como parte de los esfuerzos para llegar al objetivo de completar una fuerza nuclear".

El alto funcionario no mencionó en qué fecha se hizo ese ensayo, pero puede tratarse de la prueba realizada el pasado 3 de septiembre, considerada por los expertos como la bomba más poderosa desde que ese país inició sus ensayos nucleares, en 2006.

"Con esto, Corea del Norte ha entrado en la fase final para el establecimiento de una fuerza nuclear de acuerdo con el desarrollo de su desarrollo económico y el desarrollo simultáneo de su fuerza nuclear", agregó.

El ministro dijo que para el régimen de Pyongyang este esquema busca ser un "elemento disuasorio" para evitar que Estados Unidos pueda realizar "una invasión militar".

"Nuestro último objetivo es establecer un equilibrio de poder con Estados Unidos", insistió.

En su intervención, de cerca de media hora, el ministro norcoreano calificó como "injustas" las sanciones impuestas por el Consejo de Seguridad de la ONU por los ensayos balísticos y nucleares de Corea del Norte.

Y dijo que "es absurdo pensar" que con estas sanciones su país "se va a desviar un milímetro" en su camino para desarrollar su potencia nuclear".