La Armada argentina negó hoy que el submarino desaparecido hace 21 días en el océano Atlántico realizara varias llamadas de emergencia antes de que se perdiera su rastro y aclaró que los registros filtrados por una compañía de telefonía satelital fueron intentos fallidos de conectarse a Internet.

"No es un intento de comunicación por voz satelital, son enlaces que hace la antena (del submarino) con los satélites que están en onda (...) para tratar de enlazar internet, que al momento no fueron exitosos", afirmó el portavoz de la fuerza naval, Enrique Balbi, al brindar el parte oficial ante los medios de comunicación.

La aclaración se produce después de que anoche se filtrara un documento de la compañía Tesacom, que audita las comunicaciones de líneas satelitales de la estadounidense Iridium, en el que se reflejan ocho "llamadas" realizadas desde el ARA San Juan entre la noche del martes 14 de noviembre y la mañana del miércoles 15, cuando estableció su última comunicación con tierra.

Según Balbi, la planilla sólo incluye una llamada de voz como tal y los otros 7 registros son intentos de conectarse a la red por parte del comandante del submarino para repetir por mensaje de texto lo ya comunicado verbalmente.

"Fueron los mensajes navales normales para informar de lo que se había informado por voz, para evitar este tipo de tergiversaciones", insistió. Asimismo, señaló que, según lo aportado por Iridium a la Armada, hubo un total de cuatro llamadas de voz.

La primera, para informar de la falla que había registrado el submarino tras el ingreso de agua a sus baterías, la segunda, para comunicar su posición, una tercera para ampliar datos del incidente y la última, a las 07.19 hora local (10.19 GMT), para aclarar que ya había sido subsanado y continuaba con su trayecto.

El portavoz de la Armada también apuntó que este miércoles se encuentra en el área de operaciones -una superficie circular de casi 4.000 kilómetros cuadrados- el buque ruso "Yantar" para barrer la zona en la que el chileno Cabo de Hornos detectó un "objeto" a 940 metros de profundidad.

"Hay que tener paciencia, dejar actuar al buque con sus sensores de alta calidad y con su equipamiento -un minisubmarino- de inspección visual", afirmó.

Por otro lado, Balbi hizo hincapié en que "ante la inquietud" de algunos familiares de los 44 tripulante, la Armada ratifica su compromiso de continuar alojándolos y asistiéndolos en la localidad costera de Mar del Plata, en la provincia de Buenos Aires.