La evacuación de enfermos de Guta Oriental, un bastión rebelde próximo a Damasco y asediado por el Ejército sirio desde hace años, comenzó por fin la noche del martes, después de meses esperando por la autorización del régimen de Bachar al Asad. El área vive una grave crisis humanitaria que, según la ONU, ha causado al menos 16 muertos.

El martes por la noche cuatro pacientes, tres niños y un adulto, dejaron Duma, la mayor ciudad de Guta, en dirección a Damasco. En total 29 personas tienen que ser evacuadas en las horas y días que siguen. En varias ocasiones la ONU había reclamado las evacuaciones por razones médicas de casi 500 personas.

Estas evacuaciones no habrían podido llevarse a cabo sin el acuerdo del régimen de Damasco, que prevé, a cambio, la liberación de "prisioneros" en manos de los rebeldes, anunció el poderoso grupo de Guta, Jaish al Islam. "Aceptamos la salida de numerosos prisioneros (...) a cambio de la evacuación de los casos humanitarios más urgentes", precisó el movimiento rebelde. Guta está cercada por las tropas del régimen desde 2013.