En su ánimo de terciar en la crisis diplomática abierta entre Polonia e Israel a raíz de la aprobación en Varsovia de una polémica ley sobre el Holocausto, la canciller alemana, Angela Merkel, aseguró ayer que Alemania asume su "culpa histórica" por el Holocausto. "Somos responsables como alemanes de las cosas que durante el Holocausto, la 'Shoah', ocurrieron durante el nacionalsocialismo", declaró de la canciller en su tradicional videomensaje semanal. "Esta responsabilidad se mantiene y todos los gobiernos de Alemania tendrán que asumirla", agregó. La nueva ley aprobada en Polonia establece multas e incluso penas de cárcel de hasta tres años para quienes atribuyan "públicamente y en contra de los hechos" al pueblo o al Estado polaco la responsabilidad o corresponsabilidad en los crímenes cometidos por la Alemania nazi.

La controversia en torno a una ley que exoneraría a los polacos que colaboraron en el exterminio de judíos desató una grave crisis diplomática entre Israel y Polonia.

Las palabras de Merkel concuerdan con las del ministro de Exteriores alemán, el socialdemócrata Sigmar Gabriel, quien también aludió a la responsabilidad histórica de Alemania al asegurar que no existía "la menor duda" sobre quiénes fueron los responsables de los campos de exterminio y quiénes asesinaron en ellos a millones de judíos europeos. "Fueron alemanes", concluyó Gabriel.