Los alrededores del parque nacional de Kruger, situado al noreste de Sudáfrica, han sido testigos del fallecimiento de un supuesto cazador furtivo tras ser atacado por un grupo de leones, según ha informado el medio local Sowetan Live.

La policía local de Limpopo ha confirmado el hallazgo de unos restos humanos que no han podido ser identificados, dado que la víctima no llevaba documentos. "Al parecer, estaba cazando ilegalmente cuando fue atacado por un grupo de leones que lo devoró. Dejaron solo la cabeza y algunos trozos de carne", ha declarado el teniente coronel de la policía Moatshe Ngoepe.

Los hechos ocurrieron este sábado, cuando el fallecido se adentró en una reserva privada de Hoedspruit. Junto a sus restos los agentes encontraron un fusil normalmente empleado para la caza de elefantes y rinocerontes, dos animales muy perseguidos por los cazadores furtivos.

Según ha confirmado el propio teniente coronel, sus esfuerzos se centran en conocer la identidad de la víctima. "Todavía estamos intentando obtener su historial para tratar de acceder a su lugar de residencia", aseguró.

A pesar de lo llamativo del caso, no se trata de un hecho aislado, ya que según apuntan diferentes fuentes unas 250 personas fallecen cada año en el continente africano víctimas de los ataques de leones.