Washington / Oviedo,

Agencias / E. F.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, aterrizó ayer por la tarde en la base de Andrews (Maryland, EE UU), para iniciar una visita de Estado en la que mantendrá dos días de contactos con su homólogo estadounidense, Donald Trump, y pronunciará un discurso ante el Congreso. Se trata de la primera visita de Estado con la que agasaja Trump desde su llegada a la Casa Blanca hace quince meses.

Se espera que los dos mandatarios hablen sobre los planes de Washington respecto al acuerdo nuclear con Irán, así como de la situación en Siria y de la relación comercial entre EE UU y la UE en el contexto de la guerra comercial desatada por Trump con una subida de aranceles de la que, de momento, ha excluido a Los 28.

La cuestión iraní es especialmente candente, ya que el próximo día 12 de mayo está previsto que Trump tome una decisión sobre la permanencia o salida de EE UU del pacto nuclear con Irán. Las autoridades de Teherán han advertido que si el pacto salta por los aires reanudarán su enriquecimiento de uranio, lo que desembocará tarde o temprano en la fabricación de armas atómicas.

Macron viaja con su esposa, Brigitte, y ambos tenían previsto cenar anoche con Trump y la suya, Melania, en la histórica residencia del primer presidente estadounidense George Washington, conocida como Mount Vernon ubicada en Virginia, a las afueras de Washington. Macron tendrá hoy una reunión y una conferencia de prensa con Trump, seguida de una visita al departamento de Estado. Mañana, pronunciará un discurso ante el Congreso.