Presidente de la sectorial de piensos de las Cooperativas Agroalimentarias de Asturias (UCAPA)

Oviedo,

María José IGLESIAS

Gerardo Nieto (Valladolid, 1966), gerente de la cooperativa Unión Ganadera de Tineo (UGATI) y presidente de la sectorial de piensos de la Unión de Cooperativas Agroalimentarias de Asturias (UCAPA), se crio en La Coruña y se graduó como ingeniero técnico agrícola en la Universidad de Santiago. Vive en Candamo y asegura que se siente asturiano.

-¿La producción de piensos es una alternativa rentable en el sector agrario asturiano?

-El sector de los piensos en Asturias está en una situación delicada, como en el resto del mundo. Depende de las materias primas, entre ellas la soja, que se gestionan en mercados de futuros y son productos totalmente globalizados. Los precios se marcan en la Bolsa de Chicago. En el mercado de valores entran en juego fondos de inversión que especulan, como con otros productos.

-¿Por eso un kilo de pienso cuesta más que un litro de leche?

-Es una de las razones. Como la situación económica es inestable en todo el mundo los grandes grupos inversores buscan refugios para hacer inversiones rentables. Además, lo que ha ocurrido este verano es que la sequía que han sufrido Ucrania y Rusia, dos grandes zonas productoras, ha arruinado las cosechas, Tampoco se han cumplido las previsiones de siembras en Latinoamérica. Todo eso genera incertidumbres en los mercados. No es que haya escasez. Hay mercancía suficiente.

-¿Entonces por qué se disparan los precios?

-Porque se está incrementando la demanda en los mercados emergentes, como China o Brasil, y esto hace que las materias primas coticen al alza en los mercados de futuros.

-En Asturias hay doce fábricas de piensos. ¿Los vaivenes internacionales podrían provocar cierres?

-Algunas fábricas de piensos podrían ser inviables. Es cierto que los precios para los ganaderos suben, pero con la situación actual, lo lógico es que también se incrementase el precio de la leche y la carne en el campo. Desde luego lo que no van a bajar son los piensos.

-Los ganaderos llevan meses reclamando más dinero por sus producciones. ¿Dónde está el problema?

-Yo creo que pueden darse las condiciones para que suban los precios de la leche y de la carne. Así está sucediendo en toda Europa. España es la excepción. Algo que nunca había ocurrido de una forma tan llamativa.

-¿Por qué se resisten las empresas españolas a subir las tarifas a los productores?

-Pues es una auténtica incógnita. En todos los países, incluso en los que son excedentarios en cuota lechera, como Francia, Holanda y Alemania, ya ha subido el precio de la leche. En España el litro apenas se ha incrementado en tres céntimos desde el otoño. Los ganaderos no cubren costes.

-Tal vez una de las razones es la caída del consumo...

-En parte sí. Las industrias se quejan de que la venta de los productos que dejan mayor valor añadido se han desplomado. Ahora los consumidores se decantan por las marcas blancas y los productos de las cadenas de distribución que resultan más baratos. Es una espiral imparable.

-¿Todos los piensos que se producen en Asturias se distribuyen en la región?

-Hasta ahora sí. Casi todo lo que se produce se vende en la región. Algo se envía a Galicia, sobre todo en las factorías que se encuentran en el Occidente, como la que está ubicada en Vegadeo. Luego está ASA, que vende en León. En el apartado de piensos ecológicos sí se manda fuera más cantidad.

-El cierre de ganaderías tampoco les beneficia...

-La situación en Asturias es complicada. A las fábricas les afecta el cierre de ganaderías, eso es indudable. Los ganaderos cada vez tienen márgenes más pequeños y para colmo a las empresas se les ponen cada vez más difíciles los cobros. Buscar nuevos mercados tampoco es fácil. Hablamos de un sector que requiere el transporte de grandes tonelajes. Cada factoría tiene un radio de acción en la que es operativa.

-¿Reducir costes de producción en las factorías puede ser una medida para ser más competitivos?

-Bajar costes no es fácil. La posibilidad más fiable sería abordar un reordenamiento del mercado. Tal vez habría que realizar una reagrupación de factorías porque ahora mismo en Asturias la capacidad de producción excede a la del consumo que cae cada año.

-¿En qué porcentaje?

-En 2009 bajó en torno al cinco por ciento. Depende mucho de la marcha de los precios. Si suben, la gente produce más y compra más alimentos para el ganado.

-En Alemania han cerrado fábricas por contaminar piensos con dioxinas.

-Aquí no hay dioxinas. La vigilancia que realiza la Consejería de Medio Rural es exhaustiva. Desde que se produjo la crisis de las «vacas locas» contamos con rigurosos programas de calidad y seguimiento de los procesos de las fábricas. Todos los ingredientes que se emplean para elaborar piensos en Asturias están controlados y supervisados con lupa.