El Servicio Regional de Investigación y Desarrollo Agroalimentario (Serida), en colaboración con la Asociación de Criadores de Oveya Xalda (Acoxa), ha puesto en marcha un banco de germoplasma -semen y embriones- para garantizar la pervivencia genética de la raza autóctona asturiana. «Se trata de obtener germoplasma de los individuos más sobresalientes y de congelarlo a modo de reserva. Es importante destacar que es la primera vez que se obtiene y congela con éxito semen de machos de esta raza y que nos ha sorprendido gratamente la calidad de sus eyaculados», asegura Carolina Tamargo, veterinaria adscrita al área de Selección y Reproducción Animal.

La FAO -Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura- determina que son necesarias 398 dosis de semen congelado de un mínimo de 25 machos de la especie ovina para la conservación de las razas en peligro. Actualmente el Serida tiene almacenadas «3.577 dosis de seis carneros donantes», explica Carlos Olegario Hidalgo Ordóñez, jefe del área de Selección y Reproducción Animal. «Las razas autóctonas, aunque son poco competitivas en el plano productivo respecto a otras introducidas de mayor especialización, constituyen una importante reserva de variabilidad genética, que sería totalmente irrecuperable en caso de desaparición si no se llevan a cabo estos proyectos», afirma Hidalgo.

Actualmente, el Banco de Recursos Zoogenéticos de las razas domésticas autóctonas del Principado de Asturias cuenta con 265 embriones de la raza bovina asturiana de la montaña o casina. En cuanto a las dosis seminales, hay 90.799 de asturiana de la montaña, 18.889 de poni asturcón, 2.944 de cabra bermeya y 17.909 de gochu astur-celta. Además, «se prevé trabajar muy pronto con gallos de raza pita pinta», explica la veterinaria Carolina Tamargo.