Hace tres años, Dacian Ciolos, excomisario de Agricultura de la UE y nuevo primer ministro de Rumanía, concedía una entrevista a LA NUEVA ESPAÑA en la que advertía de los peligros de la volatilidad de precios, trasfondo de la crisis actual del sector lácteo, que podría llevarse por delante el sector agrario regional. Además se mostraba a favor de fomentar prácticas cuidadosas con el medio ambiente. La nueva Política Agrícola Común (PAC) se gestaba y el comisario rumano dejaba claro que le preocupaba el futuro de zonas desfavorecidas. Con el cambio en la Comisión fue reemplazado por el irlandés Phill Hogan, a priori, menos sensible con los problemas del campo asturiano. La región y sus ganaderos perdían un valedor. Pero si la historia es caprichosa, la política, además, es impredecible. Ahora Asturias acaba de ganar un primer ministro en Rumanía que conoce este territorio, sus problemas y fortalezas.
Limpio, íntegro, independiente, forjado y fogueado en los despachos de Bruselas, Ciolos, de 46 años, asume el cargo con el reto de liderar a un equipo de tecnócratas en un país sumido en una profunda deriva institucional. Ciolos, ingeniero agrónomo casado con una francesa, de formación cosmopolita y dado al diálogo, ha recibido del presidente Klaus Iohannis el encargo de relevar a Víctor Ponta, un antiguo defensor en la corte de Bruselas, que dimitió con todo su ejecutivo de centro-izquierda, el pasado 4 de noviembre, arrastrado por la tragedia del incendio de una discoteca de Bucarest, que se saldó con 48 muertes. Ciolos, cercano al centro-derecha -otro de sus padrinos en la carrera europea fue Nicolas Sarkozy- recibió el martes el encargo de formar Gobierno, después de manifestaciones multitudinarias contra la corrupción, celebradas en Bucarest y otras ciudades rumanas.
El ingeniero, también exministro de Agricultura, aspiraba a repetir como comisario y se llevó un disgusto al no lograrlo. Ahora, deja su puesto de asesor del actual presidente de la Comisión Europea, el luxemburgués Jean-Claude Juncker, sobre temas de seguridad alimentaria, que ocupaba desde el pasado junio. Lo hace con cierta tristeza, pero con ilusión por servir a un país lleno de bosques y montañas, como Asturias, símil que alguna vez ha empleado. La colonia rumana de Asturias sabe que con Ciolos en el Gobierno Oviedo está más cerca de Bucarest. Dacian en el fondo, sabe que también está más próximo a Bruselas que antes.
