El sector agroalimentario español está en auge y los cambios legislativos que entrarán en vigor el próximo 1 de marzo son un claro ejemplo del interés que ha despertado la capacidad exportadora de esta industria puntera.
El Real Decreto 993/2014 modifica el protocolo que adopta el Ministerio para autorizar a las empresas a exportar, reduciendo los trámites para demostrar que una empresa cumple con los requisitos exigidos por los países en los que pretende vender su producto.
Deberán, por tanto, adaptarse en su día a día a las novedades. Serán las empresas que exporten alimentos de origen animal o que contengan ingredientes de origen animal a países fuera de la UE que exijan requisitos no equivalentes a los europeos, las que deberán implantar un sistema de autocontroles específicos que garantice en todo momento el cumplimiento de estos requisitos adicionales.
Este sistema, en algunos casos, tendrá que estar certificado a través de auditorías llevadas a cabo por organismos independientes de control que rubriquen el cumplimiento de las obligaciones de seguridad alimentaria y sanidad animal que imponen las naciones compradoras.
En el caso de las industrias cárnicas inscritas en Lista Marco, el plazo se amplía hasta el 30 de junio del presente año. El Sistema de Autocontroles Específicos garantizará la correcta trazabilidad de cada una de las partidas de los productos que se van a exportar y el cumplimiento de los requisitos exigidos por los países receptores. Los procedimientos específicos de garantía y la designación de un responsable encargado de verificar su correcta aplicación serán elementos clave en esta mejora del sistema.
A este cambio normativo están sujetos los alimentos de origen animal: carne y productos cárnicos, pescado y productos transformados de la pesca, leche y productos lácteos, huevos y ovoproductos, miel, así como productos compuestos, es decir, alimentos que contengan ingredientes de origen animal.
