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Hay leche al final del túnel

La UE vaticina un repunte en las ventas y una nueva reducción de los ordeños La mantequilla registra la mayor subida en tres años

Hay leche al final del túnel

La larga crisis del sector lácteo, prolongada por más de dos años, y acentuada en los últimos meses, desde el final de las cuotas lecheras el pasado primero de abril de 2015, remonta con timidez, a tenor de los datos que van surgiendo en estas semanas. Y curiosamente una de las entidades más optimistas es la Interprofesional láctea británica, que destaca el repunte de los precios de la mantequilla en un once por ciento, avalado por datos de la Comisión Europea.

Se trata del aumento más alto constatado en los últimos tres años, que han sido un auténtico calvario para el sector lechero. En el último año y medio hubo una serie de subidas de precio que, sin embargo, no dieron lugar a una recuperación sostenida de las cotizaciones. El buen comportamiento de las tarifas de la mantequilla ha cogido tan desprevenidos a los proveedores que apenas cuentan con mercancía almacenada, así que la cotización podría seguir al alza en los próximos meses.

Además, todo indica que la producción de leche anual será más baja que la de 2015. Esa reducción de stocks es muy importante para España y Asturias en particular. Ayudaría a equilibrar el mercado lastrado por un exceso de oferta animada por la alta capacidad de producción de los países del norte de Europa, que por fin parecen dispuestos a establecer algún tipo de control en las ganaderías.

Los datos corroboran las tesis de un informe de la Unión Europea que pronostica un mercado favorable para la ganadería de leche en la próxima década, a partir de finales de este año. La Comisión calcula que las importaciones mundiales crecerán a un ritmo del dos por ciento, aunque prevé que aún no habrá aumentos significativos del precio de la leche en el campo en 2016.

Lo cierto es que el sector lácteo ha atravesado -aún padece- una crisis sin precedentes en España. Los precios han caído en picado desde enero de 2014 hasta los 30 céntimos de media por litro en Asturias, más bajos aún en otras regiones.

La liberalización del mercado anunciada por la UE desde años atrás, junto a otros fenómenos coyunturales, como el veto ruso y la caída de la demanda china, han beneficiado a Holanda, Alemania e Irlanda, los gigantes lecheros que han inundado el mercado español con productos baratos de calidad aceptable.

Para contrarrestar la "invasión" láctea en Bruselas aseguran que el aumento de la demanda internacional permitirá en teoría absorber los aumentos de producción. Los ganaderos no se fían del todo. Las industrias tampoco. Es la misma tesis que sustentó el optimismo que reinó en los despachos poco antes de la liberalización del mercado, que coincidió en el tiempo con la aprobación definitiva de la reforma de la Política Agrícola Comunitaria, con medidas que no han contribuido precisamente a calmar las aguas en regiones como Asturias.

En cualquier caso, el informe de la UE, que contiene perspectivas para los diversos sectores agrarios en el periodo 2015-2025, prevé un mercado favorable para las exportaciones y una progresiva mejora de los precios en origen, sobre todo a partir de 2020, si bien esas previsiones están condicionadas a una estabilización de las entregas de leche y hay importantes incertidumbres que podrían afectar al mercado, como una posible menor demanda internacional.

En Asturias, el pasado mes de mayo, el Gobierno regional pactó con ocho entidades bancarias un plan de refinanciación de las deudas ganaderas que permite a los profesionales "no sólo sobrevivir a la crisis láctea, sino seguir siendo competitivos", según las palabras del director general de Desarrollo Rural y Agroalimentación, Jesús Casas. La medida podría beneficiar a más de 600 ganaderos de leche, de los 2.200 que quedan en el Principado. El objetivo es reducir los gastos de las explotaciones, a través de un aligeramiento de la deuda, que es en muchos casos lo que impide la viabilidad de las granjas. El plan, respaldado por representantes de las organizaciones agrarias UCA, COAG y ASAJA, Central Lechera Asturiana, la Organización Interprofesional Láctea (Inlac), entidades bancarias, la Sociedad de Garantía Recíproca de Asturias y la Sociedad Anónima Estatal de Caución Agraria, consiste en que los bancos establezcan moratorias o renegocien los intereses de los créditos solicitados por ganaderos.

Además, esta misma semana el Ministerio de Agricultura anunció una línea de financiación de avales para reestructurar la deuda que soportan las ganaderías. La medida es consecuencia de meses de negociación entre la organización agraria ASAJA y el Ministerio, según anunció la entidad en un comunicado. Gracias a ella se subvencionará hasta un 100% del coste de los avales concedidos a los ganaderos por la Sociedad Anónima de Caución Agraria (SAECA), para créditos por un volumen máximo de 78,5 millones de euros ampliables a 100 millones de euros. ASAJA considera que es importante que las comunidades autónomas analicen la posibilidad de complementar esta medida mediante la colaboración de organismos o entidades. La organización precisa que el Ejecutivo asturiano ya ha anunciado que Asturgar complementará la ayuda por beneficiario hasta los 160.000 euros.

La actual situación de bajos precios es consecuencia de un aumento de la producción mundial, acompañada de una reducción de las compras de China y del veto ruso a los productos lácteos occidentales.

Otros países como México, Japón, Estados Unidos o Indonesia han destacado por el aumento de las importaciones en 2015. En los próximos años se espera un impacto positivo del crecimiento de la población y un mayor peso de los productos lácteos en la dieta diaria.

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