La producción de leche no da tregua. Las entregas previstas para el final de 2016 en la Unión Europea superarán a las de 2015, lo que supone un incremento de más de un uno por ciento para el cómputo de países miembros. Las estimaciones al alza continuarán en el año 2017, según indica el último informe que la Comisión Europea acaba de publicar sobre perspectivas a corto plazo para los mercados agrarios en la Unión Europea, dado a conocer esta semana.
Los datos apuntalan la tendencia al aumento de la producción en países especialmente excedentarios como Holanda, uno de los que compiten por la tarta del codiciado mercado español con productos de bajo precio y calidad aceptable. Este factor perjudica al sector lácteo asturiano y español en general, que lucha por salir de una larga crisis arrastrada desde hace más de dos años.
El informe refleja que el comportamiento por países sería diverso. Mientras que en Francia, Reino Unido (que aún figura en el estudio como miembro de la UE), España, Portugal y Eslovaquia la producción se reduciría, se mantendría fuerte en Holanda, Polonia e Italia.
El aumento de las entregas en 2016 conduciría a elevados niveles de existencias de leche desnatada en polvo y un prolongado periodo de precios bajos. Y ése es el meollo de la cuestión, ya que la recuperación de las tarifas es fundamental para que el sector lácteo asturiano comience a ver la luz después de un largo túnel.
Lo cierto es que los precios de los lácteos comienzan a recuperarse tímidamente, especialmente la mantequilla, la leche entera en polvo y el suero en polvo, y en menor medida la leche desnatada en polvo, el queso cheddar y el queso gouda, pero igual que pasó en crisis anteriores, como la de 2009, estos incrementos no se han visto reflejados en el dinero que perciben los ganaderos por su leche, ya que el mercado lácteo de la UE sigue teniendo un exceso de oferta.
Los ganaderos de la Unión Europea recibieron un precio medio de 26 céntimos por litro en mayo, lo que supone una ligera bajada respecto al precio percibido en abril, de acuerdo con los datos del Observatorio Lácteo de la UE. Se trata de la retribución más baja en los últimos cuatro años, y no sólo comparada con el mes de mayo sino con cualquier mes de esos ejercicios. El Observatorio estima que la caída no ha parado y que en junio los ganaderos volverán a ver cómo su leche alcanza todavía menos valor.
En el caso de España, el dato de precios para mayo que maneja el Observatorio es de 28 céntimos por litro, una media más baja que la de Asturias, donde el litro se mantiene en 31 céntimos, gracias a la política aplicada por Central Lechera Asturiana.
Ante la situación poco clara que atraviesa el sector, las cooperativas de España, Francia, Italia, Portugal, Finlandia y Austria han firmado un documento que se ha enviado al Parlamento europeo, a la Comisión y a los gobiernos de los estados miembros de las organizaciones firmantes del documento para reclamar que devuelvan el equilibrio entre la oferta y la demanda de lácteos.
A pesar del mantenimiento del embargo ruso, se espera que en general las exportaciones comunitarias de lácteos aumenten en un 5 por ciento en 2016, unas 900.000 toneladas más de leche que el año pasado.
