Asturias sale en defensa de las marcas de calidad del sector agroalimentario tras un informe elaborado por la Comisión de los Mercados y la Competencia (CNMC), en el que denuncia las "múltiples restricciones" que genera este modelo en España. La consejería de Desarrollo Rural niega tales limitaciones y asegura que tanto las Denominaciones de Origen (DOP) como las Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) son "algo más que una actividad mercantil". Los consejos reguladores son, en palabras del director general de Agroalimentación, Jesús Casas, organismos que contribuyen a preservar la identidad y tradición de un territorio. "Hay que seguir luchando por la singularidad cultural del medio rural. Sin las denominaciones de origen algunos productos, como la manzana asturiana, posiblemente habrían desaparecido", sostiene Jesús Casas.

La Asociación Española de Denominaciones de Origen e Indicaciones Geográficas Protegidas (Origen España) respalda la posición del Principado. El presidente José Enrique Garrigós asegura que las marcas de calidad contribuyen al fomento de una "economía sostenible", son un "motor de empleo" en las zonas rurales y "garantizan a los consumidores, no sólo una reconocida calidad, sino un origen y el mantenimiento de las características organolépticas de los productos".

En Asturias hay nueve consejos reguladores: Afuega'l Pitu, Cabrales, Vino de Cangas, Chosco de Tineo, Faba Asturiana, Gamonedo, Queso Casín, Sidra de Asturias y Ternera Asturiana. A ellos se suma uno más, el del Queso Los Beyos, que es suprautonómico. Es decir, está constituido por Castilla y León y el Principado. Precisamente el informe de Competencia pone el foco en las estructuras que abarcan más de una región, coincidiendo con la preparación de un nuevo real decreto por parte del Ministerio de Agricultura. Entre sus críticas, las Denominaciones de Origen limitan la entrada de nuevos operadores, merman la capacidad de competición de otros elaboradores y establecen límites a la producción y la transformación.

La asociación que integra a las marcas agroalimentarias del país recuerda que el modelo actual supone uno de los ejes centrales de la Política Agraria Común (PAC) de la Unión Europea para potenciar la producción local frente a las importaciones.