El plancton de toda la vida da superalimentos. Y desde hace unas semanas, también supercremas. La empresa gijonesa Neoalgae cultiva microalgas, unos microorganismos con efectos antioxidantes, ricos en proteínas y omega 3, para extraer sus biocompuestos saludables e incorporarlos a la cosmética y a la alimentación humana y animal. Millones y millones de células marinas -miden entre tres y diez micras- crecen en grandes columnas de fotobiorreactores en un invernadero de la facultad de Biología de la Universidad de Oviedo. Son como enormes probetas de color verde flúor, o en otros casos marrón claro, que, en función de la luz, la temperatura y los nutrientes que reciben, evolucionan más o menos rápido. De ahí salen los supernutrientes asturianos que están revolucionando el mercado nacional.
Los biólogos Ignacio Albert de la Rosa y Fidel Delgado Ramallo dirigen la única empresa regional, y una de las pocas de España, en convertir el fitoplancton en un alimento saludable de última generación. "En Europa estamos empezando ahora, pero en Japón llevan décadas aprovechando los beneficios de las microalgas. La sociedad las ha puesto de moda por su interés por los hábitos saludables. Y lo cierto es que su potencial es enorme", aseguran los responsables de Neoalgae, que nació en octubre de 2012.
En sus laboratorios elaboran hoy en día productos de todo tipo: piensos para caballos, cerdos y gallinas, cremas de verduras con superalimentos, biocompuestos marinos en cápsulas y hasta cosmética natural. Esta última línea de producción acaba de salir al mercado con cinco tipos de crema diferentes tanto corporales como faciales. Y la idea es seguir creciendo: "Tenemos en mente sacar pronto un gel de ducha y nuevos suplementos alimenticios", adelantan.
Aunque la investigación en el campo de la microalgas está en constante evolución, hoy en día existen bastante limitaciones para introducir el plancton en la comida. Europa sólo permite trabajar con dos especies: la Spirulina y la Chlorella, ricas en vitaminas, ácidos grasos, aminoácidos esenciales y polisacáridos. De ahí, su interés como ingrediente activo para alimentos que puedan reforzar las carencias nutricionales de colectivos deficitarios en defensas, como niños o ancianos. Neoalgae comercializa desde Gijón estos complementos alimenticios en polvo y en cápsulas, además de todo tipo de cremas de verduras para prevenir el envejecimiento y con efectos antioxidantes: de calabaza y chía, de verduras y Spirulina, de remolacha y maca, de vichysoisse con Chlorella...
"Las vendemos a través de internet y en una treintena de tiendas especializadas del país, aunque ahora mismo estamos inmersos en su internacionalización", dicen. De hecho, participan en un proyecto de exportación junto a varias pymes asturianos, que lidera el centro tecnológico agroalimentario Asincar, y acaban de obtener el sello Halal para abrir mercado en las naciones musulmanas.
