Se continúa tentando la suerte en el karting y esta vez hay que lamentar el accidente que se producía en los entrenamientos libres del sábado en la prueba de Cibuyo, donde volcaba el piloto alevín Iker García, que se fracturaba la clavícula y afortunadamente está fuera de peligro. Justo en esa jornada las instalaciones carecían de una ambulancia y de un médico, algo muy lógico y razonable en este deporte, aunque sí es cierto que aún no esta reglamentado. Precisamente ahora es cuando la FAPA, que son los organizadores del Campeonato, son conscientes del riesgo y por si acaso anunciaban en el «briefing» que para las próximas citas serán los pilotos los que asuman los gastos, incrementándoles de nuevo la inscripción.