Oviedo, J. B. PINO

Nadie es ajeno al descenso de matriculaciones acaecido el pasado mes de julio, el mejor mes para las ventas en este sector, algo que insistentemente auguraban las asociaciones de concesionarios, fabricantes y distribuidores.

El fin del plan de ayudas a la compra, así como el incremento del IVA han puesto contra las cuerdas al sector, que ha logrado un pleno de mínimos histórico en el mes de julio, y que está previsto continúe en los próximos meses. Fabricantes, concesionarios y distribuidores dejarán de facturar y el Gobierno dejará de ingresar sus buenos impuestos.

El descenso de matriculaciones en julio a nivel nacional fue del 24,1%, durante el primer semestre los incrementos giraban entorno al 40%. En Asturias, donde ya se estaba en negativo, el Gobierno regional no concedió ayudas a la compra, las cifras de ventas fueron de casi un 50% menos, haciendo saltar todas las alarmas.

Existen marcas y concesionarios que no se estrenaron en julio, y algunas que no se habían estrenado en tres o cuatro meses. Es el caso de Cadillac, Chrysler, Jeep, Saab, Santana y Smart, por no citar a las exclusivas Ferrari, Hummer, Infinity, Lotus, Maserati, Lamborghini. Otras han realizado cifras tan bajas que sólo la dependencia de grandes grupos automovilísticos les permiten subsistir.

A nivel nacional, durante el primer semestre del año casi todas las CC AA estuvieron incrementando ventas y en Asturias se estuvo en números rojos. Aún así, la patronal del sector reclamó acciones del Gobierno regional con mucha timidez, excesivo «paño caliente» que se dice popularmente.