Oviedo,

El Wind, pequeño cabrio biplaza de Renault llegará en septiembre al mercado español. Con una longitud de 3,8 metros ocupa un lugar entre el Twingo y el Clio y la marca del rombo lo define como coupé-roadster. Se trata de un vehículo, en cierto modo, único en el marcado, que rompe moldes por su atractivo diseño y evidencia su marcado carácter dinámico. Un auténtico «2 en 1»: coupé y cabrio al mismo tiempo, con una versatilidad excepcional para usuarios que busquen un vehículo lúdico que además se pueda utilizar a diario.

El techo del Renault Wind marca una verdadera ruptura en las tecnologías de los automóviles descapotables, con un ingenioso sistema de techo eléctrico que se abre en solamente 12 segundos. La elección de un techo pivotante rígido aparece como la solución más adecuada para ofrecer un funcionamiento de capota sencillo, rápido y fiable, preservando al mismo tiempo el volumen del maletero, sea cual sea la posición del techo.

Después de desbloquear el techo con una empuñadura, basta con accionar el botón de apertura eléctrica para que el techo gire sobre sí mismo entre los montantes de la custodia y se apoye silenciosamente sobre la tapa del maletero, lo que permite mantener un volumen constante de 270 dm3 VDA, tanto con el techo abierto como cerrado.

A primera vista, el Wind muestra su dinamismo, robustez y modernidad, dejando ver una silueta deportiva con el capó inclinado hacia delante, una cintura de carrocería elevada, unos flancos muy esculpidos y un arco fijo con líneas llamativas sin llegar a ser agresivas. En la vista frontal el elemento que más destaca son las grandes ópticas, con una parte coloreada que le proporcionan una «mirada» con bastante personalidad.

El doble saliente en la alineación de los reposacabezas crea un vínculo armonioso entre el interior y el exterior y recoge los fundamentos de los roadsters, con dos gibas en la parte trasera que continúan su línea, al más puro estilo «Bugatti Vieron» y refuerza las sensaciones de conducir al aire libre.

Su diseño trasero, con la integración del alerón en la tapa del maletero, le confiere un estilo y sus luces tipo boomerang expresan una identidad luminosa de cierta exclusividad.

En el interior del Renault Wind nos acoge un cockpit dedicado a las sensaciones de pilotaje que añade más referencias deportivas, con unos asientos envolventes con reposacabezas integrados y una instrumentación completa alojada en unos contadores muy vistosos rematados por una visera translúcida (roja o negra) inspirada en el universo de la moto.

Los pedales de aluminio, el volante deportivo y las numerosas piezas de cromo satinadas dinamizan la atmósfera carbono oscuro y reafirman el carácter único del coupé roadster.

La ingeniería Renault Sport Technology, con base en Les Ulis, se apoya en los equipos del Tecnocentro implantados en Guyancourt, para que Wind cuente con los mejores expertos de la empresa y ha sido la división encargada de poner a punto el chasis para que responda eficazmente al margen de deportividad que se le pide al coche. El Renault Wind se fabrica en la planta eslovena de Novomesto y comparte plataforma con los RS, Clio II y el Twingo.

El Renault Wind ólo se ofrecerá inicialmente con motores de gasolina y caja de cambios manual de 5 velocidades, los mismos propulsores que llevan el Twingo y el Clio. Se trata del 1.2 TCe que entrega 100 caballos y tiene un precio de 18.095 euros y el 1.6 16V de 133 caballos de potencia cuyo precio es de 19.305 euros.