Langreo, L. M. D.

Un conductor ebrio protagonizó en la madrugada del domingo un espectacular accidente en la rotonda de la calle Sabino Alonso Fueyo de Lada. El conductor, que era el único ocupante del vehículo, fue sometido al pertinente control de alcoholemia por parte de la Policía Local de Langreo. Los resultados fueron «escandalosos», ya dio un nivel de 1,24 miligramos de alcohol por litro aire respirado, es decir, cinco veces más de lo permitido (0,25 mg/l). Fue detenido por un delito contra la seguridad vial.

Durante todo el fin de semana se produjo un total de seis accidentes de tráfico en el casco urbano de Langreo, aunque todos ellos se saldaron con daños materiales. El más espectacular de todos fue el protagonizado por el conductor que quintuplicaba la tasa de alcoholemia permitida. Este choque tuvo lugar, tal y como informó la Policía Local, a las 4.30 horas de la madrugada del domingo. Ocurrió en la glorieta de acceso a Lada, en la calle Sabino Alonso Fueyo. El vehículo chocó contra la rotonda, produciendo daños de consideración a los elementos decorativos. Dio varias vueltas de campana, chocó contra la fachada del edificio número 67 de esta calle y quedó finalmente en medio de la calzada, volcado, con las ruedas hacia arriba.

Tras personarse en la zona una patrulla, los agentes comprobaron que el conductor, casi milagrosamente, no tenía ninguna herida de importancia. Entonces procedieron a realizarle el control de alcoholemia, que dio un resultado de 1,24 miligramos por litro de aire respirado, el resultado más elevado de este tipo de pruebas desde que las realiza la Policía Local langreana. Los agentes quisieron realizar una segunda prueba para corroborar el resultado, pero el estado de embriaguez del conductor impidió que ésta se produjera. «No es que no quisiera hacer la prueba, es que no podía», se apuntó desde la Policía. La patrulla arrestó al conductor como presunto autor de un delito contra la seguridad vial.

Mieres

La de este domingo en Langreo no es la primera detención que se realiza a un conductor que da un resultado muy superior al permitido en un control de alcoholemia. El pasado mes de marzo, en Mieres, la Policía Local arrestó a una joven que, tras ser sometida al control, dio una tasa de 1,18 miligramos de alcohol por litro de aire respirado, un nivel similar al del conductor arrestado en Lada, casi quintuplicando lo permitido.