Langreo, Lucía CORTINA
El deporte es una actividad fundamental para favorecer el afán de superación, la competitividad y la interrelación social entre quienes lo practican. Ésta fue la razón que llevó a la Asociación Rey Aurelio, con sede en El Entrego y creada hace doce años, a organizar con carácter anual un torneo de fútbol sala en el que participan agrupaciones de disminuidos intelectuales de toda la región.
Ayer, aproximadamente 140 futbolistas tomaron parte en el campeonato, celebrado en la cancha del centro deportivo Juan Carlos Beiro, de Langreo. Vencer y alzarse con uno de los trofeos era la meta para todos los jugadores. Sin embargo, uno de los valores inculcados por sus entrenadores y cuidadores es el de la importancia de saber perder y felicitar al adversario.
En La Felguera compitieron, además del equipo anfitrión, las asociaciones Fraternidad, de Tapia de Casariego; Fasad, de Meres; Rey Pelayo, de Avilés; Asproden, de Mieres; Vegapresas, de Gijón; y Don Orione, de Llanes. Los finalistas fueron, en la categoría I, los jugadores de Avilés y los de Gijón. En la segunda, subieron al podio los defensores de las camisetas del Rey Aurelio y Don Orione. La emoción no sólo se palpaba sobre la pista de fútbol sala, también en las gradas. Desde allí, cada agrupación animaba enfervorizada a sus compañeros y celebraba con ellos los numerosos goles que se presenciaron durante toda la tarde.
El torneo, organizado por la asociación del Valle del Nalón, es una actividad que cuenta con una gran aceptación entre todos sus participantes. Desde que fuera creada, Rey Aurelio dedica un buen número de horas semanales a fomentar la práctica de deportes entre sus miembros. Según explica su presidenta, Milagros Novo, «favorecen tanto su forma física como mental, aunque quizá lo más importante sea cómo los enseñan a relacionarse y a saber perder con deportividad». Además de fútbol, sus 180 integrantes practican con asiduidad natación, aerobic, expresión corporal y atletismo, modalidad que el jueves los llevó a Llanes, para participar en una prueba de integración con deportistas sin discapacidad.
