La fiscalía investiga la falsificación del estudio de impacto del hormigonado de la Ruta del Alba

La fiscalía investiga la supuesta falsificación del estudio de impacto ambiental de las obras de hormigonado de la Ruta del Alba, en Sobrescobio. La falsificación afectaría, según pudo saber LA NUEVA ESPAÑA, a la firma de uno de los documentos del estudio. La rúbrica que aparece en el informe correspondería a un alto cargo de la Administración del Principado, quien, tras prestar declaración ante el fiscal, negó ser su autor. Al no ser una irregularidad ambiental, sino administrativa, la investigación no recae en el fiscal de Medio Ambiente, Joaquín de la Riva, sino en otro de los miembros del ministerio fiscal, según confirmó este diario.

Éste no es el primer contratiempo al que se enfrenta la obra de hormigonado de uno de los principales atractivos del parque de Redes, Reserva de la Biosfera. Izquierda Unida denunció en abril, en la Junta General del Principado, la actuación, aunque no la llevó al Juzgado, al carecer de la evaluación de impacto ambiental (EPIA), un trámite imprescindible para todas las actuaciones de más de 300.000 euros que se ejecuten en monumentos naturales, como es el caso de la senda.

Así lo hacía constar el diputado de IU-BA-Los Verdes Francisco Javier García Valledor en la carta que remitió al consejero de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio e Infraestructuras, Francisco González Buendía. En la misiva le sugería además la modificación del proyecto, sustituyendo el hormigonado de algunas partes de la ruta en esta su segunda fase. Un mes después de la denuncia, el Gobierno regional paralizó los trabajos e inició la redacción del estudio de impacto ambiental, que ahora investiga el fiscal.

La Ruta del Alba ya tiene hormigonado un primer trazado de 4 kilómetros, desde Soto de Agues hasta el Retorturiu. Y ahora, cuando se produjo la polémica, se iba a acometer una segunda fase, hasta La Vega de 1,6 kilómetros.

García Valledor aseguró en septiembre, durante una visita a la Ruta del Alba, que se habían iniciado «dos procedimientos ambientales divergentes». Por un lado, el estudio de impacto ambiental y, por otro, el de evaluación ambiental, «que se abren sobre la misma actuación, en el mismo momento y bajo el mismo expediente», denunció. El 14 de agosto se remitió un escrito de la Dirección General de Calidad Ambiental dirigido a determinadas instituciones para la recogida de sugerencias sobre el documento de consultas previas ambientales sobre el proyecto de la Ruta del Alba. Cinco días después, el «Boletín Oficial del Principado» (BOPA) abrió el período de información pública del estudio preliminar de impacto ambiental de la misma actuación.

IU no sólo llevó su queja al Gobierno regional sino que también remitió un informe hace unos días a la Unesco (Organización de las Naciones Unidas por la Educación, la Ciencia y la Cultura), que en 2001 declaró Reserva de la Biosfera el parque natural de Redes. En ese documento, García Valledor califica de «atentado» medioambiental el proyecto de hormigonado de la ruta. Pretende, de esta forma, conseguir que el organismo internacional «presione» al Principado y al Ayuntamiento para que consideren «otras alternativas» ya que la actuación proyectada «supondrá un destrozo en la ruta», que es «monumento natural, pertenece además a la Red Natura».

El alcalde de Sobrescobio, Marcelino Martínez, que ayer aseguró desconocer la investigación de la fiscalía, defiende el proyecto presentado por el Principado y acusa a IU de atacar a la comunidad vecinal de Sobrescobio, que fue galardonada con el premio «Pueblo ejemplar» de la Fundación Príncipe.