Oviedo / Langreo, L. M. D.
El avance del Plan Territorial Especial del Medio y Alto Nalón, desarrollado por la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio e Infraestructuras del Principado de Asturias, plantea la posibilidad de permitir «el uso turístico de los embalses» de Tanes y Rioseco, «con actividades en todo caso compatibles con la función abastecedora de agua» que tienen estas instalaciones. Según el avance del documento, este uso podría desarrollarse «de acuerdo con la experiencia de otros embalses y con todas las cautelas y regulaciones que desde un punto de vista territorial deban introducirse». De esta forma, los técnicos del Principado abren la puerta al uso lúdico de los pantanos del Alto Nalón, vetado en reiteradas ocasiones por el Gobierno regional a través de la misma consejería de Medio Ambiente.
Uno de los objetivos de este Plan Territorial Especial, que abarca los territorios de los concejos de Langreo, San Martín del Rey Aurelio, Laviana, Sobrescobio y Caso, es el de coordinar «las múltiples iniciativas y políticas» existentes sobre ordenación territorial, urbanístico y de conservación del paisaje, «armonizar acciones no siempre convergentes». Tomando el río Nalón como eje vertebrador de la comarca, se plantea la necesidad de proteger sus márgenes en las zonas donde no estén urbanizadas, y recomienda llevar a cabo varias iniciativas con el fin de utilizar y proteger «con las cautelas ambientales necesarias» el propio cauce. De esta forma, el plan establece la posibilidad de recuperar y adecuar «tradicionales balnearios naturales, favoreciendo el uso del Nalón como una piscina natural, un uso frecuente y tradicional en las riberas de Laviana (Los Xerrones, La Chalana, Puente d'Arcu y el Barrillón)».
Dentro de estas consideraciones, el avance del plan apunta «la posibilidad del uso turístico de los embalses», con «actividades en todo caso compatibles con la función abastecedora de agua» (Tanes y Rioseco son el almacén de agua de todo el centro de la región). El Principado se ha mostrado, desde la creación del parque natural de Redes, contrario a la apertura al baño y a la navegación sin motor de los pantanos, y esta misma primavera rechazó esta petición en la Junta General del Principado.
El documento apuesta además por la recuperación de los tramos fluviales degradados, con la coordinación de iniciativas de los ayuntamientos y la Confederación Hidrográfica del Cantábrico. Las zonas en peor estado son «determinadas márgenes que funcionan como vertederos, con residuos urbanos e industriales asociados a la actividad minera cesante, como el caso del tramo comprendido entre Sotrondio y Barredos».
En todo caso, según fuentes del Principado, este documento es «una base desde la cual se negociará» con los ayuntamientos, tras lo cual se procederá a desarrollar su redacción definitiva.
