Langreo, E. PELÁEZ

La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) y la Unión de Guardias Civiles de Asturias denuncian que el cuartel del instituto armado en Langreo cada vez tiene mayores signos de deterioro. El estado de las instalaciones ha empeorado en los últimos días a raíz de las lluvias y las humedades se extienden por todo el inmueble. «En las dependencias administrativas de Tráfico la situación es lamentable», aseguró el secretario de la AUGC, Alberto García Llana, dos meses después de que el vestuario de ese destacamento se haya trasladado a dependencias de la Policía Local.

Langreo dispone de un nuevo cuartel, cuyas obras concluyeron hace más de un año, pero las discrepancias entre el Ministerio del Interior y Sogepsa (Sociedad Mixta de Gestión y Promoción del Suelo de Asturias) en torno al pago del IVA, mantienen a los agentes en un edificio con numerosos desperfectos. El exterior ha sido vallado debido a la caída de cascotes a la calle. «Tendría que estar declarado en ruina», señaló el representante de la AUGC, que aludió a la «escasa voluntad política» para abrir las instalaciones.

La Unión de Guardias Civiles de Asturias (UniónGC) pretende promover «iniciativas consensuadas» con los grupos políticos langreanos para lograr «unidad de acción ante este grave problema que afecta no sólo a los agentes destinados en las dependencias de Langreo sino también a los ciudadanos ya que el actual estado deterioro amenaza con derrumbes». La organización ya ha convocado la primera reunión, con Izquierda Unida.

La Unión de Guardias Civiles denunció en varias ocasiones el deterioro que sufre el cuartel y reclamó el traslado urgente a las nuevas instalaciones ubicadas en la calle La Unión. Se dirigió a la Comisión Europea y a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social para trasladarles el estado del actual acuartelamiento, unas dependencias «inhabitables». También convocó una concentración y remitió una carta a la alcaldesa de Langreo, Esther Díaz. La apertura del cuartel fue reclamada también desde instancias políticas.

Las obras de construcción de las nuevas instalaciones se iniciaron en 2009, promovidas por Sogepsa y ejecutadas por la constructora Procoin, con un coste de 3,3 millones de euros. El convenio firmado para la ejecución de la obra incluía el derribo de las viejas instalaciones, situadas en Langreo Centro, para levantar 325 pisos.

La alcaldesa acusó el pasado mes de marzo a Sogepsa de paralizar la apertura del nuevo cuartel al no querer negociar la entrega del edificio. Esther Díaz aludió a sus «reiteradas peticiones» de celebración de un Consejo de Administración de Sogepsa para tratar este asunto.