Langreo,

Miguel Á. GUTIÉRREZ

La obra del soterramiento de las vías de Feve Langreo ha encontrado un nuevo obstáculo en el camino. Los trabajos -retomados en febrero después de un parón de seis meses y con un sobrecoste de 10 millones- se han visto afectados por la indefinición surgida sobre las alturas del falso túnel. La renuncia del Gobierno regional, sustentado por Foro Asturias, al proyecto del tren-tran obliga ahora a rediseñar pendientes y gálibos, diferentes para unidades de tranvía y para trenes convencionales. Hasta que se redefinan las dimensiones del paso subterráneo, la obra no podrá avanzar en ese tramo y deberá centrarse en la ejecución de la estructura de la nueva estación de Sama, según aseguró ayer el viceconsejero de Infraestructuras, Juan Vega. Feve incluso tenía en construcción cuatro unidades especiales de tren-tran planificadas para circular por la línea Gijón-Pola de Laviana, con una inversión de casi 22 millones, que ahora podrían ser derivadas a otros recorridos.

El rechazo del Ejecutivo regional al tren-tran también deja en el aire 140 millones de fondos mineros solicitados a Industria por la mesa regional de la minería (cuando gobernaba el PSOE) que incluía 110 para el propio tranvía y 30 más para completar el soterramiento la instalación de las vías, los sistemas de señalización y el tendido eléctrico. El viceconsejero de Infraestructuras, que ayer visitó las obras de la nueva estación de Sama acompañado por dirigentes locales y concejales de FAC, anunció que el Principado ha pedido una reunión con la nueva cúpula de Feve para instar a la compañía a financiar la «superestructura ferroviaria». «El anterior gobierno de Asturias y el anterior Ejecutivo central pusieron en marcha una obra de soterramiento sin raíles ni catenarias, unas infraestructuras que corresponden a los responsables de la compañía ferroviaria», esgrimió.

Vega argumentó, asimismo, que el Principado no iniciará la obra del túnel del soterramiento de Feve en Langreo hasta que la compañía estatal aclare «con qué trenes piensa circular por aquí. Cuando lo haga, podremos decir alguna cosa sobre el túnel. Desde el punto de vista urbanístico, la diferencia es muy importante, pero también lo es desde el punto de vista técnico».

Y es que la renuncia regional al tranvía tiene una incidencia directa sobre las alturas del túnel planteado inicialmente, que ahora deben redefinirse ya que vienen determinadas por el tipo de convoy. «Son unidades diferentes. Los trenes-tranvía cuentan con unas características y prestaciones que tienen que ver con todo: dimensiones, gálibo, potencia, tipo de rampas que son capaces de superar... Son datos fundamentales», precisó Vega, que añadió: «El Principado está haciendo lo más prudente, concentrarse en una zona en la que este dato (la configuración de la altura del túnel) todavía no es relevante». En la misma línea, el responsable regional subrayó que actualmente, el proyecto «avanza a velocidad notable» en la nueva estación de Sama, «el área donde es más razonable que avance dadas las circunstancias».

El viceconsejero de Infraestructuras demandó, por otro lado, un compromiso del Gobierno central. «El Ministerio de Industria es responsable del convenio que se firmó en su día, que recoge la financiación íntegra de esta obra», aseguró Vega, que focalizó todas las culpas del retraso del soterramiento en el anterior Gobierno regional de PSOE, a pesar de que la obra quedó prácticamente paralizada en septiembre, ya con FAC al frente del Ejecutivo. «Tenemos un convenio con Industria que, a la vista de los sobrecostes generados por los gestores de la obra bajo la responsabilidad del anterior Gobierno, deberá ser estudiado, revisado, trabajado. Esto requiere un interlocutor que, a día de hoy no existe, ya que el nuevo Gobierno de Madrid no da la cara», señaló Vega, que subrayó que el Principado «no ha dado a conocer» ese sobrecoste. No obstante, la ex directora general de Minas e integrante de la lista autonómica de Foro Asturias ya adelantó en un acto de su partido en Langreo que el gasto añadido es de 14 millones: cuatro en la fase de adjudicación y diez en el desarrollo de la obra.

Juan Vega remarcó que el último plazo fijado para concluir la obra, finales de 2013, se mantendrá «si Feve asume sus responsabilidades e Industria las suyas». A pesar de que los trabajos se encuentran actualmente ejecutados al 30% y apenas han avanzado en seis meses, el responsable regional afirmó que ahora la obra «está a pleno rendimiento», aunque esté concentrada en la nueva estación de Sama.