Langreo,

Miguel Á. GUTIÉRREZ

Los robos de vehículos descendieron un 54 por ciento en Langreo y San Martín del Rey Aurelio en el último año, según los datos que maneja la Comisaría Nacional de Policía de la comarca. El balance de actividad en lo que va de año también registra, en comparación con los datos del mismo período de 2011, un descenso de los robos en locales. Por el contrario, han aumentado un 20 por ciento los hurtos y un 40 por ciento los robos en viviendas. En este último caso, la mayor parte de las casas afectadas son inmuebles abandonados o que en la actualidad se encuentran deshabitados y en los que los delincuentes, más que pertenencias de los propietarios, acuden en busca de griferías, electrodomésticos o materiales de construcción que puedan resultar de algún valor.

La reducción del número de robos de vehículos (24 en lo que va de ejercicio frente a los 53 del mismo período del año anterior) viene motivada por diversos factores, según explicó Honorino Laviana, jefe de la Comisaría de Langreo-San Martín. «Los delincuentes más activos en este campo se encuentran actualmente en prisión y también hay que tener en cuenta que la seguridad va mejorando y los modelos más modernos de vehículos son más difíciles de robar». En ocasiones, los autores de este tipo de delitos queman el coche después de haberlo sustraído para no dejar huellas. En 2011, este modus operandi dejó calcinado en el barrio de Pénjamo, en el distrito langreano de La Felguera, un coche que había sido robado y otros dos vehículos contra los que el primero colisionó.

La estadística también constata una disminución global de un 6 por ciento de los robos con fuerza. Disminuyen los asaltos a establecimiento, pero, por el contrario, aumentan los robos en viviendas, que en la mayor parte de los casos están vacías. «Los casos con los que nos estamos encontrando son de viviendas viejas que están abandonadas o que no están habitadas porque sus propietarios hace tiempo que se mudaron a otra residencia fuera de la comarca. Son casas que no tienen puerta blindada y a las que los delincuentes acceden para llevarse todo lo que puedan encontrar: herramientas, antiguos electrodomésticos, griferías...», apuntó Laviana, que también expresó que en estos robos no se ha detectado la intervención de grupos organizados. En Langreo y San Martín también se han incrementado un 20 por ciento los hurtos, especialmente las faltas, aquellas que son inferiores a 400 euros.

En las últimas semanas, la Policía también está registrando un incremento de denuncias de estafas y hurtos sufridas por vecinos, generalmente personas mayores, en sus casas. En estos casos, una o más personas, fingiendo estar recogiendo firmas o donativos para una causa benéfica, piden dinero por los domicilios. Posteriormente, aprovechando la buena fe de los vecinos inventan alguna excusa para que les permitan acceder al domicilio y para que se ausenten momentáneamente, por ejemplo, pidiendo un vaso de agua. Es entonces cuando aprovechan ese momento de descuido para hurtar el dinero o los objetos de valor que se encuentran a su alcance.

El jefe de la Comisaría animó a los ciudadanos, tanto en este último caso como en otros, a ponerse en contacto con la Policía si tienen alguna sospecha de indicio de delito.