Langreo, L. M. D.

El Consejo de Gobierno del Principado acordó ayer, dentro de los asuntos tratados por la Consejería de Agroganadería y Recursos Autóctonos, multar con 36.000 euros y la retirada de la licencia por diez años a tres cazadores que cometieron una infracción «muy grave» en el concejo de Laviana en octubre de 2011. Cada uno de los denunciados, entre los que se encuentra el ciclista Benjamín Noval, tendrá que hacer frente al pago de 12.000 euros.

Según se explicó desde la Consejería, a los sancionados se les «retira la licencia de caza», que no podrán obtener de nuevo «en el plazo de diez años». Asimismo se les obliga a «indemnizar, con carácter solidario, a la administración del Principado de Asturias en una cantidad de 1.500 euros, por el animal abatido ilegalmente», un ciervo.

La denuncia se remonta al 5 de octubre de 2011, cuando agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) denunciaron a tres personas por practicar el furtivismo en el coto de caza de Laviana. Según explicó entonces la Guardia Civil, los agentes de encontraban haciendo un servicio de prevención del furtivismo en época de la berrea del venado cuando recibieron la llamada de un guarda del coto de Laviana. En ella alertaba de que se había producido un disparo, lo que precipitó la búsqueda de los cazadores sin permiso.

Finalmente, la Guardia Civil localizó un coche, en el camino de Campa Felguera a Fechaladrona, en el que viajaban tres jóvenes, uno de ellos Benjamín Noval. En el coche se encontraron «elementos ópticos de gran calidad, un teleobjetivo, unos prismáticos y un telémetro, así como navajas y un hacha utilizada para el despiece de animales». En el vehículo se decomisó además un «arma larga rayada sin documentación». También dentro de coche encontraron los agentes restos de un ciervo que los sancionados «reconocieron haber abatido y abandonado en el monte, llevando consigo únicamente los lomos del animal».

La infracción «muy grave» de la que fueron acusados los tres jóvenes, cazar «en terreno cinegético sometido a régimen especial sin la autorización pertinente» establece multas de entre 7.000 y 90.000 euros, además de la retirada del permiso de caza por diez años.