El Entrego, L. M. D.

El derribo del centro de estudios medioambientales (Cempa) de El Entrego ya ha comenzado. A lo largo de la jornada de ayer una máquina empezó a tirar la ya deteriorada estructura del edificio, construido hace 16 años y que no ha tenido ningún tipo de uso desde entonces. El Cempa, convertido en un símbolo de la mala planificación y el despilfarro de las distintas administraciones, se convertirá, cuando acaben de tirarlo, en una parcela en la que se harán huertos urbanos. En su día, la construcción del inmueble tuvo un coste de 900.000 euros.

Los trabajos del derribo del centro ambiental de El Entrego tienen un presupuesto de 30.957 euros. En el pleno municipal del mes de octubre, a petición de una moción del PP, el Ayuntamiento de San Martín del Rey Aurelio acordó proceder a su derribo. En poco más de mes y medio se ha pasado de las palabras a los hechos, y tras adjudicar los trabajos de demolición éstos ya se han puesto en marcha. El Gobierno local calcula que tras el derribo se podrán habilitar unos 90 huertos en los 6.000 metros cuadrados de terreno municipal que se liberará. Según se indicó en su día, el Ayuntamiento redactará el proyecto y buscará la financiación para poner en marcha esta iniciativa de los huertos urbanos en cuanto concluyan las labores de derribo.

Está previsto que cada una de las parcelas resultantes tenga una superficie aproximada de 60 metros cuadrados. El Consistorio estudia habilitar una instalación anexa con servicios comunes en la que cada horticultor disponga de taquilla para sus aperos, además de aseos comunes. Otra alternativa es la de hacer una pequeña caseta individual para cada parcela, o para un grupo de huertos. La puesta en marcha de parcelas urbanas para plantar hortalizas es un tipo de actividad que tiene un fuerte arraigo en distintas ciudades europeas, y que en la parroquia gijonesa de Leorio se ha desarrollado con gran éxito. El Ayuntamiento gijonés recibió 217 solicitudes para ocupar 96 parcelas destinadas a vecinos del concejo mayores de 65 años o prejubilados.

Hace una semana se hizo público que la Asociación Cultural La Semiente de El Entrego había llevado ante la Fiscalía del Principado la gestión del centro ambiental al considerar que las distintas administraciones (Principado y Ayuntamiento) habían descuidado su obligación de velar por el patrimonio público. El edificio, antes del derribo, estaba ya en ruina.