El "tren de la libertad" suma plazas. La iniciativa puesta en marcha por las asociaciones Mujeres por la Igualdad de Barredos (Laviana) y Tertulia Feminista Les Comadres de Gijón para protestar contra la reforma de la ley del aborto ha llenado ya los cuatro vagones disponibles del convoy, con 150 plazas, y ahora fletará autobuses desde diversos rincones de Asturias. En el valle ya tienen reservadas todas las plazas de un autocar y les falta poco para ocupar todos los asientos de un segundo que tiene como destino el Congreso de los Diputados, en Madrid, donde entregarán un manifiesto.

Desde otras localidades como Gijón, Oviedo, Tineo, Allande, Mieres y Cangas del Narcea también partirán autocares el próximo 31 de enero, aseguró Aida Fuentes, integrante de Mujeres por la Igualdad de Barredos, ayer en una reunión con los alcaldes del valle, que ofrecieron su apoyo al "tren de la libertad". El primer destino del viaje, que parte de Gijón, es Valladolid, donde se celebrará un encuentro con otras asociaciones que participarán en la iniciativa ideada en Asturias. Al día siguiente, el 1 de febrero, partirán hacia Madrid, a la estación de Atocha. Desde allí emprenderán junto a mujeres de otras comunidades una marcha a pie al Congreso para "exigir que se mantenga vigente la actual Ley de salud sexual y reproductiva y de interrupción voluntaria del embarazo".

El "tren de la libertad", indicó Fuentes, "nos desbordó y habrá representación de prácticamente todas las comunidades autónomas del país". Es una iniciativa que ha tenido "repercusión internacional ya que acudirán también desde Francia", afirmaron representantes de las asociaciones Mujeres por la Igualdad de Barredos, Fontana de Blimea y El Alba de Langreo. Entre los viajeros del "tren de la libertad" está la alcaldesa de Langreo, María Fernández, que participó en la reunión junto con los regidores de San Martín (Enrique Fernández), Laviana (Adrián Barbón) y Sobrescobio (Marcelino Martínez) y la gerente de la mancomunidad (Irma Fernández). El portavoz de los alcaldes fue Barbón, que disculpó la ausencia del regidor de Caso e indicó que el Gobierno central "se equivoca" con una ley que "rompe con la realidad social". "Esta reforma no es necesaria", indicó.