El centro de cría y reserva genética del urogallo cantábrico del parque de Redes suma actualmente 17 ejemplares (5 machos y 12 hembras) después de que se hayan desarrollado con éxito cinco de los pollos nacidos el pasado verano. Todos estos ejemplares se destinarán a reforzar la comunidad reproductora de la instalación con lo que este año, contrariamente a lo que ocurrió la campaña pasada, no habrá suelta de aves en el medio natural.
El equipamiento de Sobrescobio forma parte de programa de actuaciones del proyecto LIFE+ Urogallo cantábrico, que coordina la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. De los cinco pollos nacidos durante la temporada de crías que han conseguido desarrollarse tres son hembras y dos machos. Todos ellos "permanecerán en el centro", según indicaron responsables de la Fundación Biodiversidad: "Este año se descarta la reintroducción al medio natural de los nuevos juveniles con el objetivo de reforzar la población del centro y aumentar así el número de reproductores de cara a la siguiente temporada de cría".
Suelta
El pasado año se llevó a cabo la primera experiencia de liberación de ejemplares del centro de cría al medio natural. Cuatro urogallinas nacidas en las instalaciones de Sobrescobio formaron parte de la iniciativa. De ellas, una fue hallada muerta en el parque de suelta y las tres restantes lograron adaptarse durante varias semanas a su hábitat. Uno de los ejemplares murió por el ataque de depredadores y otro fue encontrado en el embalse de Riaño. En el tercer caso se desconoce la causa de la muerte. "Las tres hembras liberadas en la zona de Picos de Europa de Castilla y León lograron alimentarse de manera autónoma durante un periodo mínimo de dos meses en libertad y recorrieron largas distancias, demostrando que el proceso de reforzamiento es posible, pero que la mortalidad juvenil de esta especie es muy elevada", expusieron los representantes de la Fundación Biodiversidad.
Los urogallos que van a ser soltados reciben durante las doce primeras semanas de vida todo tipo de cuidados en el centro de cría y adquieren las destrezas necesarias para su supervivencia en el medio. Después acceden al parque de cría-voladero, en el propio centro de Redes, que favorece el desarrollo de la musculatura para el vuelo de los urogallos y contribuye a mejorar su capacidad de selección de hábitats favorables en libertad. En este espacio, los ejemplares cuentan con una hembra adulta, que les hace de nodriza.
Tras la primera fase de adaptación hay otra que se desarrolla en el propio medio natural, en un amplio parque de presuelta en los Picos de Europa.
