La Fiscalía solicita 17 años y 7 meses de prisión para un hombre al que acusa de seis robos, varios de ellos en viviendas, cometidos en su totalidad en San Martín del Rey Aurelio. Los hechos se produjeron en un corto espacio de tiempo, entre junio y septiembre de 2013. También se acusa a una mujer de ser su cómplice en uno de los robos con violencia que se cometieron. Piden cuatro años de prisión para ella.

El primero de los robos se produjo entre el 14 y el 15 de junio de 2013, en la avenida de la Constitución de Sotrondio. Según la Fiscalía, el acusado rompió una ventana, entró en la casa y se llevó, entre otras cosas, candelabros, lámparas, radiadores, cuadros y radiadores. Por este "robo con fuerza" se le piden dos años de prisión. En agosto de ese mismo año, "accedió a otras cuatro viviendas" del mismo inmueble de Sotrondio. Se llevó "varios efectos" en cada una de ellas. Piden tres años de cárcel por este "delito continuado de robo con fuerza".

El 8 de septiembre, de madrugada, el acusado "se encontró con un menor de edad" al que le impidió el paso y al que le quitó la cartera, en la que llevaba 50 euros. Se trata de un "robo con intimidación" por el que la Fiscalía solicita cuatro años de cárcel. Esta misma pena se pide por un robo el 10 de septiembre de 2013. En este caso, junto con la mujer juzgada y junto "a una tercera persona menor de edad", y de madrugada, encontraron "a un hombre, al que empujaron al suelo para quitarle la cartera, en la que tenía 150 euros". Por la caída la víctima tuvo lesiones que tardaron dos semanas en curar.

El quinto de los robos enumerados por la Fiscalía en su escrito de acusación tuvo lugar el 15 de septiembre de 2013, entre las 22 y las 22.15 hora, en la travesía Montes de Llaímo de San Martín. El acusado, "aprovechando que no se encontraba dentro su propietario", entró en la vivienda, un bajo, "rompiendo la puerta de acceso, llevándose varios efectos". Ese mismo día, justo antes de la medianoche, en la avenida de la Constitución de Sotrondio, entró en un bajo rompiendo el cristal de la puerta de entrada. No llegó a llevarse nada porque "fue sorprendido en su interior por agentes de la Policía Local". Por el quinto robo se piden cuatro años de prisión, y siete meses más por el último. En total, la pena solicitada asciende a 17 años y 7 meses de cárcel.

En el registro domiciliario que se realizó en la vivienda de los acusados se encontró la mayor parte de los objetos robados los meses anteriores.