El Ayuntamiento de Langreo introducirá las modificaciones establecidas por el juez en el convenio colectivo de los trabajadores municipales y no recurrirá la sentencia dictada por el Juzgado de lo contencioso-administrativo número 5 de Oviedo. El gobierno local ha mantenido en los últimos días contactos con los representantes sindicales para llegar a un acuerdo que permita introducir los cambios necesarios tras anular el tribunal el convenio colectivo de los trabajadores municipales del periodo 2012-2015.

El recurso había sido presentado por el sindicato SIPLA-CSL, que consideraba que "discriminaba" a la Policía Local en el pago de festivos o el reparto de turnos. El ejecutivo municipal ha convocado la mesa general de negociación para dar el visto bueno a los cambios tratados. De esta forma, se podrán introducir las modificaciones y "evitar conflictos" hasta que concluya la vigencia del actual convenio colectivo, el próximo mes, aseguró la concejala de Personal, Paula Díaz.

Próximamente se tendrá que negociar un nuevo convenio colectivo. El fallo del Juzgado de lo contencioso-administrativo número 5 de Oviedo estima que no existe separación entre el acuerdo regulador de las condiciones laborales de los funcionarios y el convenio colectivo del personal laboral. "No se advierte qué materias serían propias de uno y cuáles de otro y que cláusulas tienen un carácter netamente laboral y cuáles no porque hay una refundición absoluta", recoge. Esta situación, refleja el fallo, genera "inseguridad jurídica al realizar cualquier impugnación en una jurisdicción u otra".

"No es que hayan pactado las materias conjuntas de funcionarios y personal laboral en un mismo texto sino que se unifican y refunden totalmente dos instrumentos jurídicos en idéntico articulado, rompiendo así la distinta naturaleza de uno y otro y los diferenciados cauces de negociación colectiva", explica el juez. La nulidad se aplicó a todo el convenio colectivo ya que el "vicio es radical e inescindible". Al anular el documento no se entró a valorar las impugnaciones realizadas. Los servicios jurídicos del Ayuntamiento estudiaron la sentencia para valorar si recurrirla o iniciar un proceso para incorporar los cambios necesarios para que se ajuste al fallo del juez. Finalmente, se dieron los pasos para materializar esta segunda opción.