Brieves / Luarca (Valdés),

E. PELáEZ

Un nuevo argayu provocó ayer problemas de circulación en la carretera que conecta San Martín de Luiña (Cudillero) con Brieves (Valdés) a la altura de esta última localidad. Un desprendimiento provocó también el corte de la carretera del faro de Luarca durante la tarde de ayer.

El argayu en la vía AS-222 se produjo en una zona en la que se han registrado otras fanas en los últimos años, coincidiendo con temporadas de intensas lluvias. Se trata de un tramo en el que el Principado intentó variar el trazado de la carretera dentro de las obras de acondicionamiento que se desarrollaron entre las localidades de Brieves y Muñás. Se preveía recortar una pronunciada curva, pero tras la excavación se produjeron varios desprendimientos. Las obras en ese tramo concluyeron quedando pendiente esa zona. El Gobierno regional intentó en dos ocasiones habilitar un nuevo trazado, pero finalmente esta opción fue descartada y decidió mejorar el recorrido existente. Pero continuaron produciéndose desprendimientos en ese punto de la carretera.

Vecinos de la zona reclamaron al alcalde de Valdés, Juan Fernández Pereiro, que tomase cartas en el asunto y que se dirigiese a la Consejería de Infraestructuras para que buscase una solución que permitiese estabilizar el talud. La situación sigue igual ante el malestar y la alarma de los usuarios de la carretera, que sufren de forma frecuente estos desprendimientos que llegan a cortar la vía de circulación.

«Menos mal que no pasaba nadie cuando cayó el argayu», aseguró uno de los conductores que ayer sufrieron retenciones por los trabajos de retirada de las rocas y la tierra acumuladas en la calzada. Mientras, la Consejería de Infraestructuras, Política Territorial y Vivienda ha licitado la mejora de la vía en el tramo que une Muñás y Arcallana. La obra tiene una inversión de alrededor de 8 millones de euros para 12,5 kilómetros de recorrido.